23 enero, 2021

Directa al Pilier - Rincón de Bonanza

 Directa al Pilier

23 enero de 2021



1ª Ascensión por: J. Gallego y F.J. Gª Gallego,  el 24 de octubre del 1981

Esta vía nunca la he hecho, la verdad que por aquí me queda mucha faena por hacer.

Hoy vamos Elías, Plinio y yo. Los bares están cerrados debido a las restricciones del momento COVID que vivimos. Vamos con la sensación de contrabandistas de libertad, la sicosis colectiva es tremenda y el despliegue policial acorde a la misma.

1er largo, 4+, 20m. Subo yo por la derecha a un primer contrafuerte bajo el plantado muro del pilar.

2º largo, 6a/+, 50m. Sigue Elías, por la izquierda, 
tocando lo mínimo unos impresionantes y adosados bloques, para acometer una compacta placa, con un diedro a derecha y continuar por fina y plantada placa con mucho baile, hasta la reunión.


3er largo, 6c, 55m. Continúo yo, por unas gradas entre bloques y hacia la derecha, para tomar una vertical y fina placa con pasos entre volúmenes y fisuras, con algún abombe con pasete incluido, hasta situarme bajo un primer techo escalonado en dos. Me salto una reunión y sigo, pasando los techos y tomando una buena fisura a la izquierda, para continuar por placa hasta debajo de otro techo, más pequeño pero más complejo, pasando este, hacia la izquierda a una placa muy fina de  escasos y pequeños agarres, por la que continúa con una ligera tendencia a derecha saltándome la reunión original para salir a un tramo un poco roto y escalonado hasta la reunión de la Océano Pacífico, mucho más cómoda.



4º largo, 6a, 30m. Continúa Plinio, haciendo una corta travesía a izquierda para retomar la línea de la Directa del Pilier, bajo un desplomado filo/diedro, que continúa en un tramo de buenas placas y fisura, hasta salir de la pared.



Acabamos y montamos los rápeles de la Océano Pacífico, (OJO, es muy fácil que las cuerdas queden atascadas), Haciendo un primer y corto rápel de 20m. Después otro de 50m, donde hay que llevar cuidado por donde se pasan las cuerdas, que no obstante, yo bajo el último arrastrando el nudo de unión conmigo hasta pasar un saliente fisurado de la repisa. Después otro rápel de 50m hasta el suelo.

20 enero, 2021

Últimas incursiones de una formación entre restricciones

Atando cabos...

Debido a la situación global desde marzo del 2020, la formación específica para la obtención del grado superior de escalada, se ha visto condicionada a remansos entre olas de pandemia y sicosis social. No obstante los objetivos se han ido logrando sin salir de casa (Provincia) desde las salidas de este verano durante el mes de agosto sobre todo, aunque echando de menos un tour peninsular que nos podría haber aportado ricas experiencias en otros ambientes roqueros.  Pese a todo y a toro pasado, desde el día entre el 14 y el 19 de enero, nos embarcamos Marta, Javi, Miguel y yo, en un repaso general de final de curso, para completar y ajustar calendario en la formación para conducción en paredes y autorrescate. Al fin y al cabo, en la provincia de Alicante nos sobra roca y grandes paredes, hay mucha piedra donde practicar, aprender y disfrutar, sin menoscabo de una excelente formación.

Inicialmente, nuestro profesor, Miguel Anta, plantea lo que a mí me parece como un crucero vertical de inquietantes y vertiginosas escaladas, que además de producirme insomnio, me hace sentir como el escalador más patata de toda la huerta alicantina, y es que llevo muuuucho tiempo escalando de renta, sin tiempo para entrenar, sin tiempo para escalar, con poca motivación y aún menos vigor, pero… un cosquilleo en la espalda, me hace pensar que estas plumas que me noto brotar…son para volar.

Aunque al final el planing inicial no pudo llevarse a cabo (como Eclipse y Ventisquero de la Condesa, Ponoig) debido a restricciones por el COVID y que aún continúa agravándose, se ha ido tirando de planes B e improvisación, con una parte de exploración, otra de paseo botánico, otra de picnic y otra de asueto playero, he aquí, las memorables y disfrutonas escaladas realizadas en espléndida compañía:


Vía Quiromancia, Castell de Bolulla


Vía Espolón Rod, Cima Senyera de Penya Roc


Puig Divino, Vía la Taula













Serra Gelada - Vía Diedro EDwards - Martínez

18 enero, 2021

Serra Gelada - Diedro Edwards-Martínez

 18 de enero de 2021
Serra Gelada, Benidorm.

Vías: Diedro Edwards-Martínez y Edge Control.

En principio íbamos al Barranco del Mascarat, con idea de hacer El Vuelo del Aguila, teniendo en cuenta de que ibamos tres, sólo me echo 4 o 5 friends, fisus y un puñado de cintas. Pero al final Marta tampoco  pudo venir, con lo que Javi cae en la cuenta de que sólo llevamos ese material de autoprotección. Estamos cansadetes ya y no es plan de enmarronarse mucho y me comenta de ir a Serra Gelada, ya que yo no conozco la zona y además se comentó el día anterior como una alternativa relax. A mí me parece perfecto.

Hay que cruzar Benidorm en dirección a la playa de Levante y tomar las calles que ascienden al cerro de la cruz, en la más alta de estas, ya en la sierra, hay que girar a la derecha hasta llegar a un ensanche frente a una casa, donde acaba la calle y empieza la sierra. Parte un sendero que en dirección sur desciende entre las losas de piedra, hasta un pino rastrero en donde tenemos la opción de girar a la izquierda y hacer un descenso en zigzag bastante precario entre las viras arenosas de las aéreas paredes que conducen al sector de la derecha del diedro Edwards-Martínez, o buscar a la derecha del pino y un poco más abajo, un rápel de 15 metros que nos deja junto a una brecha-collado por el que descendemos hacia la izquierda, y desde donde vemos el destacado y gran diedro sobre un contrafuerte escalonado.

Diedro Edwards – Martínez, 5+, 100 m.

1ª ascensión por Mark Edwards y José Martínez. 21- 09 - 2013


1er largo, 4+, 50 m. Comienza en un corto escalón vertical del primer contrafuerte, un cordino en el segundo escalón indica el inicio. Tras el 2º escalón, hay una reunión que Javi se pasa y sigue a la izquierda para buscar el principio de la fisura del diedro, donde monta la 1ª reunión. La escalada aquí causa bastante impresión de primeras, es muy aérea y los cantos en general son romos llenos de arena y filos meteorizados que aunque parecen frágiles a primera vista, en conjunto es una roca con muy buena adherencia y bastante compacta. No obstante, subo cogiendo y pisando los filos horizontales y alveolos con cierta precaución y desconfianza.


2º largo, 5+, 50 m. Sigo por la fisura del gran diedro, auto protegiendo y chapando los cordinos existentes, en general muy fácil, pero con algún resalte muy vertical que obliga a centrarse en la escalada y dejar de mirar el magnífico paisaje. Acabo el diedro y veo una reunión a la izquierda muy cerca sobre una placa, poco más arriba una argolla roscada que va a parar al rápel de la bajada, y por la derecha otra argolla que indica otra alternativa, un poco más vertical pero muy fácil. Sigo por este lado pero cuando llego arriba no hay reunión y la monto con un friend y fisus en una fisura de los bloques superiores.

Vía muy estética y bonita, de autoprotección, con un ambiente extraordinario. Muy recomendable.

Como nos ha sabido a poco, y es muy pronto, descendemos para hacer otra de las que hemos visto por la pared de la derecha del diedro.

Todo este tramo de pared está plagado de vías, que podemos dilucidar por la cantidad de cordinos lazados en puentes de roca, estos cordinos que vemos por toda la pared dispersos son vías de autoprotección, muchos de ellos están en puentes de roca realizados con taladro atravesando los agudos pliegues que en sus capas recuerdan un gigantesco hojaldre. En general las vías son de unos 100 metros fraccionadas en cortos largos de menos de 30 metros. Los croquis se pueden descargar de la página http://www.compasswest.co.uk/ del aperturista, algunos de forma gratuita y otros pagando una cantidad simbólica a modo de donativo pro-equipamiento o a un precio determinado en el caso de las guías completas.

Vía Edge Control, 5+, 110 m.

Descendemos esta vez por el rápel y después por la canal que parte de la brecha-collado hacia el Este. Hasta situarnos otra vez en el inicio la vía del diedro, al parecer este inicio es común para diversas vías.


1er largo, 4+, 50 m. Comienzo yo por los 2 primeros escalones del contrafuerte inicial, pero cuando llego a la reunión intermedia, sigo recto por otro contrafuerte muy vertical y ligeramente desplomado pero con muchísimo canto hasta llegar a otra reunión cómoda sobre repisa, ya en la placa de la derecha del diedro.


2º largo, 5+/, 45 m. Sigue Javi, por la vertical placa de la derecha, que obliga a remar de brazos aunque con mucho canto, y hacia los grandes desplomes que forman una visera sobre el muro. Aquí se salta una reunió intermedia y continúa en travesía hacia la derecha para pasar al otro lado de la pared por debajo de los techos, al girar vuelve a ascender entre alveolos y prominentes filos muy desplomados al principio y muy vertical hasta una zona ya despejada bajo las placas finales, donde hay otra reunión.


3er largo, 4º, 15 m. Continúo yo por una placa con una argolla y de adherentes gotas de agua hasta llegar al último y corto contrafuerte, donde en su parte superior hay un expansivo con argolla para la reunión que refuerzo con un fisu.

Decir, que para cerrar este relativamente intenso periodo final de formación, ha sido este un sitio especial de gran ambiente y muy tranquilo hoy.

Por cierto, hay que enviar email con 2 días de antelación a  serragelada@gva.es avisando de cuando y donde vamos a escalar, ya que es parque natural protegido y tiene ciertas restricciones y prohibiciones en diversas áreas de especial interés.

17 enero, 2021

Puig Divino - La Taula

 

17 de enero de 2021

Puig Divino, Aitana

Vía: La Taula, 7b, 130 m. Equipada con bolts y algún clavo.

1ª ascesión por: Q. Soler y J. M. Orts en 1979

Equipada por N. Sánchez y J. C. Romero

Hoy el plan era hacer algo relajado para bajar un poco las bombonas de los antebrazos y hombros, la idea del Divino, surge como sector soleado y añade variedad y ambiente. Javi no ha hecho la Taula, ni yo tampoco, aunque tampoco estoy para disfrutarla en libre, pero a la más mínima sugerencia me apunto como si fuera a ir a la feria. Marta y Miguel deciden hacer la Milongas Sangrantes.

Vamos tranquilos y el sol ya ha entrado y hace hasta calor, subimos trepando por la característica vira que sesga esta impresionante pared en diagonal, nos separamos de Miguel y Marta y continuamos hasta la base de la pared de la Taula. El calor nos deja en manga corta antes de empezar a sudar de verdad.

El reparto de largos es fácil, a pares o nones, y parece que se me dan bien, por que le toca otra vez empezar a Javi.



1er largo, 6c+, 45 m. Comienza Javi, por la placa de la derecha del inicio de la fisura, para a los 10 metros aproximadamente, pasar a esta y continuar por ella hasta la volandera reunión. La vía está con bolts, no hay que navegar, pero hacer los pasos si que requiere estudio y mucha técnica además de la verticalidad que tiene esta pared y que se va bebiendo el hidráulico a cada movimiento. En cualquiera de los largos, no hay un reposo que no sea muy activo, por lo que prima ir bufando y rapidito.



2º largo, 7a, 30 m. Continúo yo, siguiendo la ciega y discontinua fisura y tocando las placas de ambos lados para ir progresando, pero pronto se me gasta la pólvora y me quedo colgado en 1 de los 3 totems que he traído, voy haciendo pasos para ir llegando a los bolts y entre ellos, donde no me vale nada, voy tirando de tótem, pero disfruto como un gorrinillo en un barrizal,  del ambientazo de esta pared. Aquí Javi, al llegar se toma un buen descanso y nos quedamos de picnic un buen rato colgados como adornos, contemplando el paisaje.


3er largo, 7a+/b, 25 m. Sigue Javi, intentando encadenar lo posible. Las escaladas acumuladas también le pasan factura y como puede va llegando a cada seguro, tomándose algún aire hasta llegar a la siguiente reunión, un poco más cómoda. Al anterior le había visto color, pero en este hay un tramo donde además de raro, no hay pies. Me parece un 7b brutal.

4º largo, 6b+, 30 m. Continuo yo, saliendo por fina placa hacia la derecha, para seguir por la discontinua fisura, que acaba en unos bloques que pasamos por la izquierda y después una pequeña brecha canal que acaba en una placa y la reunión.

Recogemos tras un breve descanso, y descendemos destrepando por la canal donde hay montados a cierta distancia entre ellos,  2 cortos rápeles de 10-15 m. con trozos de cuerda fija.

Escalada de 5 estrellas de deportiva equipada. Muy exigente en su grado. Personalmente me ha parecido  dura y nada amable pero me quedo con ganas de repetir.

16 enero, 2021

Penya Roc - Cima Senyera - Espolón Rod

 

16 de enero de 2021

La Cima Senyera, Penya Roc, Aitana

En principio habíamos quedado para abrir vía nueva en el Castell de Bolulla, pero entre unas cosas y otras, déficit de material de equipamiento y la seguridad de que en la zona observada ya hay vías, nos decanta por ver la posibilidad del plan inicial del primer día e ir a Ponoig. Nos consta que está confinado y que la ferrata está igualmente restringida, pero no vemos motivo para no poder escalar, después de todo ni siquiera pasamos por Polop. Pero al llegar al camino de acceso al aparcamiento nos encontramos unas vallas de la policía local y decidimos cambiar planes. Improvisando lo más cercano es Penya Roc, así que nos vamos allí.

Hacemos 2 cordadas compuestas por Miguel y Marta que van a la Nou de Octubre y Javi y yo en dudas (no por mi parte) entre el Espolón Rod y la Milana Bonita, esta última me consta que es bastante más picante que la primera, a si es que me sabe mal por Javi, que seguramente hubiera preferido esta última, pero acabamos en el Espolón Rod, con el pretexto que es mi primera en esta pared.



Vía Espolón Rod, 6b+, 300 m. Vía de autoprotección con las reuniones equipadas con bolts y escasos seguros fijos.

1ª ascensión por: Javier Martín, J. Carlos Romero, Jesús Romero y José Anaya,  en noviembre de 1996

El acceso a la pared está muy perdido, la maleza ha crecido y las zarzas nos laceran en la subida casi hasta pie de vía. A la sombra hace bastante frio, aún podemos ver algo de hielo por el sendero. A pares o nones, le toca a Javi comenzar.


1er largo, 6a, 55 m. Hay que buscar una flecha picada que queda oculta bajo las crecidas ramas de un lentisco, aunque es bastante evidente, a la izquierda de la chimenea del plantado espolón central de la Cima Senyera. Entre tramos de placa fisurada con abundantes y volanderos bloques, hierbas y arbustos, Javi se abre paso por la zona más evidente y limpia hasta una plataforma a la derecha sobre un pequeño arbolito. Después subo yo limpiando lo que puedo y tomando conciencia de una roca donde tendremos que tener cuidado con lo que tocamos y donde ponemos los pies, lo que me causa una cierta inseguridad e inquietud, que me duraría ya toda la vía.

2º largo, 6a, 30 m. todo roto. Sigo recto hacia un cordino y mucho más arriba en un pequeño desplome un parabolt, al principio por placa compacta que se va cuarteando dando paso a un tetris de encajados bloques de diversos volúmenes y muy volanderos, que paso sin respirar y sin tocar cual gato de peluche, hasta llegar a una cómoda reunión sobre un enorme mojón de piedras sueltas apiladas bajo un muro desplomado. En este largo Javi también va limpiando y quitando algún potencial proyectil que cuando cae, hace retumbar el circo donde nos encontramos como si fueran truenos.



3er largo, 6b+ roto, 30 m. Continúa  Javi hacia la izquierda, sobre unos bloques que se mueven al pisar y cogiendo cantos minados prestos a petar, encima hay que remar de alguno de ellos para levantarse en el desplome, por suerte son dos pasos y enseguida pasa a una buena placa más fácil, que en travesía diagonal hacia la izquierda nos conduce a la reunión, en pleno gran diedro. Cuando paso voy limpiando lo que puedo, tirando algún bolo de considerable tamaño y opto por dejar los cantos a los que me he tenido que coger para subir, con la sensación de que estoy dejando un petardo de feria, pero es que es lo que hay…

4º largo, 6a+, 30 m. Salgo de la reunión hacia la derecha, limpiando agarres de matas de pinchos que voy podando con la mano, hacia una fina placa donde espero que alguna púa de las que se han clavado me sirvan para hacer tracción, un triste espit protege el apabullante paso, pero voy descubriendo canto que me permite subir encima de la placa y tomar un sistema de fisuras por cuarteados bloques y un pino que me sirve para lazar un cordino, hasta que me planto en la reunión casi sobre la arista del espolón.

5º largo, 3º, 30 m. Largo de transición, casi caminando hasta el interior de una amplia canal muy herbosa, para situarnos en el lado derecho de esta.

6º largo, 5+, 55 m. Continúo yo por la zona central derecha más limpia, hacia un cordino y después navegando entre bloques muy plantados llenos de vegetación en todo su contorno, hasta situarme bajo una amplia fisura muy plantada, que supuestamente es por donde va la vía, pero veo que es muy ancha y sólo llevo un friend grande, y me apabulla el pensar en hacer todo este tramo con un solo seguro, así es que me paso la fisura y enmarañándome entre los matojos accedo al interior del gran diedro, que forma casi una chimenea, con tramos muy plantados y ligeros desplomes que aún me acojonan más que la fisura off which que he eludido, pero ya no me queda otra salida y con una continua monserga plañidera, voy subiendo poco a poco hasta que el diedro se vuelve del todo impracticable por la abundante vegetación y salgo hacia la derecha por una placa que pese a la primera impresión es más fácil de lo que parece, hasta situarme en la reunión ya cercana al filo del espolón. En conjunto paso mucho miedo, aunque sé que todo es pura sicología y los seguros que he puesto en su mayoría están a cañón. Me quedo con la impresión de haber hecho pasos de 6b, aunque es sólo eso, impresión.

7º largo, 5+, 55 m. Continúa Javi por el espolón, hasta que este se confunde con el muro bajo una gran sabina, tras pasos finos y delicados sobre matojos cariñosos y bloques saltarines, Javi desaparece en el interior de la sabina y al poco rato me indica reunión.

8º largo, 3º, 30 m. Sigo ya en una fácil trepada entre los bloques de lapiaz cimeros hasta el punto más alto de la aguja de la Cima Senyera.

Desde aquí. Podemos contemplar el laberíntico conjunto de crestas, canales y agujas que forman este escarpado macizo, comenzamos el descenso buscando rastros de pasos, ramas rotas, señales que se vuelven equívocas y nos hacen dar algunas vueltas medio trepando para arriba, para abajo, hasta llegar a una corta chimenea vertical que destrepamos y nos deja en otra de las confusas viras, que rodeando otra aguja nos va haciendo descender y situarnos en la parte Oeste hasta conseguir llegar a una amplia canal de gradas que con pequeños destrepes nos dejan en por fin en el suelo. Rodeamos las moles rocosas hacia el Sur y llegamos al flanco Sur de la Cima Senyera, donde un muro lleno de rectilíneas y verticales fisuras, se planta y forma el collado que separa esta mole de la Aguja del Pilar, descendemos próximos a esta pared y buscando hacia la canal el rápel de 40 m. que nos sitúa en la d pedrera de bajada al sendero.

En la bajada buscamos a Miguel y Marta en el trazado de la Nou de Octubre en la pared de la Capella, yo veo 2 puntos característicos y hasta me parecen moverse, se lo indico a Javi y tras muchas indicaciones y planimetría se los hago ver, aunque él no acaba de verlos como a nuestros compañeros, insisto y hasta le indico que veo el tono azul de uno de ellos, ya Javi casi convencido y con algún comentario sobre lo que les queda, coge el móvil tras recibir un mensaje, lo lee y mirándome con cierta ironía, me dice que nos están esperando en el coche, miro otra vez la pared, y las sabinas vuelven a moverse sacándome la lengua, agacho la cabeza y lo achaco a la edad, que le vamos a hacer…

Escalada de dificultad moderada pero de carácter comprometido, y con numerosos pasos delicados. Ya me habían dicho que aquí, no hay vías fáciles. No la recomiendo como toma de contacto con el sector, pero mi más sincera admiración a los aperturistas de esta inaugural vía.

15 enero, 2021

Castell de Bolulla - Vía Quiromancia , 7a, 190m.


16 de enero de 2021


Castell de Bolulla. 

En principio el plan es el Ponoig, pero hay dudas por la situación de confinamiento en Polop, y dado que al final se hace tarde, nos desplazamos a Bolulla para indagar en el barranco del Estret de les Penyes, con toma de contacto en la peña del Castell, con idea de escalar y ver otras posibilidades de apertura de vía. Una vez a pie de pared, estudiamos (yo con mucho recelo) las 2 líneas más conocidas de este plantado muro, La Quiromancia y el Diedro Expósito. Decidiendo acometer la primera, en 2 cordadas compuestas una por Marta y Javier y otra con Miguel y yo.

Vía Quiromancia, 7a/+, 190 m. Semi-equipada.
Aperturistas: Jota y Makoki en febrero/marzo de 2014


Parece que por aquí viene poca gente, el acceso está muy asalvajado y en muchas partes de las fisuras de la vía ha crecido una exuberante flora que le da un toque más silvestre a la escalada. Miramos los paños de roca y planificamos la posible apertura de algún nuevo itinerario, aunque durante el descenso comprobaríamos que la zona observada ya está abierta por Juan Carlos Guichot “Papila”.








1er largo, 6b crocanti gótico engargolado, 55 m. Comienza Marta en su cordada con Javi, a la izquierda de la pared por un destacado engendro deleznable de diedro-chimenea, donde la quiromancia consiste en leer, no las rayas de las manos, si no las rayas de los bloques y escombros que deberemos coger y pisar con cierta abducción y prestos a levitar sobre el polvo y tierra que se nos cuela hasta la ropa interior, lo que junto a la sensación de inminente derrumbe, nos hace proferir juramentos y comentarios más propios de rudos albañiles que de  deportistas. Al final de lo más ancho del diedro naranja desploma. Marta sale por la izquierda y rodeando unos grandes pianos, que con buen pulso y entonando una lúgubre cantinela, resuelve sin desafines ni desatinos, acabando con una finita travesía hacia la derecha, donde hay que seguir el compás sin apenas tocar las teclas de otros tantos voluminosos instrumentos en ciernes. Después sube Javi, tranquilo y sin decir nada, lo que me anima a no llorar mucho. Después voy yo de primero en la 2ª cordada, no puedo evitar corear a Marta, cual vaquero tirolés, sobre todo cuando empiezo a tocar cantos que expelen tierra, como si hubiera una rata escondida escarbando. Al final del diedro chimenea naranja, miro por donde ha pasado Marta y decido salir recto por el desplome e ir por la derecha, ya que los bloques son más pequeños y yo no tengo tanto ritmo, luego la fina travesía y Marta me recibe con una sonrisa, diciendo que he subido rápido…levitando pienso yo.





2º largo, 6c/+, 55 m. Javi ya ha salido cuando llego yo a la 1ª reunión, al poco le sigue Marta, que nada más salir, me comenta lo abrasivo de este paño de roca en una fina travesía inicial, (mejor, pienso yo, en el peor de los casos pegando la pancha me puedo quedar como un velcro). Sigue de primero Miguel, disfrutando y apretando en este excepcional largo de buena roca, con pasos muy técnicos de equilibrio plaquero. Después cierro yo el grupo disfrutando mucho de este largo y sosegándome en mi inquietud por el próximo.




3er largo, 7a (muy amable), 40 m. Llego a la reunión frito, me tomo un buen descanso y sin mucho ánimo de encadene, empiezo el largo, que poco a poco voy resolviendo, cogiendo alguna cinta en algún momento para pasar la cuerda y no ostiarme en el intento. Largo también de excelente roca y muy disfrutón. Al final del mismo voy con visión de túnel, no miro más que el próximo buen canto donde poder tomar aire, ya que voy en plan buzo tirando de apnea entre pasos, y así me paso le reunión, tras chapar uno de sus paraboles sin darme cuenta y me hago otro buen tramo de otros 10 m con algún pasete tonto. hasta llegar a una cornisa en travesía a la derecha donde sin apenas material puedo montar una reunión decente.



4º Largo, 6b/, 40 m. Marta y Javi, ya están rapelando cuando llega Miguel. Este medio largo que queda, sigue en travesía a la derecha, con un par de pasos muy finos, que Miguel resuelve sin problema, hasta llegar a un marcado y espléndido diedro terminal. Después de este, una corta zona fácil nos sitúa en la reunión y 1er rápel por la vía del diedro Expósito.

El descenso es con 3 rápeles. Después de hacer el primer rápel, me despisto un segundo, un descuido, un lapsus,…llámese error del carajo, y la cesta se me va de las manos, la veo caer y perderse en una manigua de tupidas zarzas. Me toca bajar con dinámico, y tras rizar unas nuevecitas cuerdas, se decide por unanimidad obligatoria, que Miguel me descienda. Me consuelo pensando que esta vía bien vale una cesta nueva, y el descenso humillante cual saco de patatas hasta el suelo en el 3er rápel. El disfrute ha sido total y la sensación que pondera sobre la vergüenza, y que me llevo a casa, es la de euforia y satisfacción.

Muy buena escalada, en una zona nueva para mí y con muy buen ambiente. Total ¡!!

La vía, pese a la banda sonora del primer largo, de efectos intimidatorios, es muy buena y para mi gusto es de 5 estrellas. Enhorabuena a los aperturistas !!