09 abril, 2022

Quedada en el Cabeço, pro-recuperación de Juan Agulló y Elías Abad.

 9 de abril de 2022

En el verano de 2021, tras las largas temporadas de restricciones y confinamiento, Carlos  Llorca  (Charlie) crea un grupo de Whatsapp para convocar una quedada para pasar una jornada de escalada y vernos las caras después de tanto tiempo. Por motivos de compatibilidad de unos y otros, la fecha se va posponiendo y se  acacba fijando para primeros de octubre. 

El 2 de octubre, Elías y yo vamos a escalar al Puig Campana con la intención de hacer la Ros Gregori y ver si se puede recuperar este trazado de apariencia elegante por el bastión central de la cara oeste.

De esta actividad y su crítico desenlace publiqué una entrada que describe los pormenores de la experiencia de ese y el siguiente día. https://vericuetossilvestres.blogspot.com/2021/10/puig-campana-rescate-en-el-espolon.html

Tras el accidente de Elías, y en respuesta a la convocatoria para quedar el  siguiente fin de semana del 9 de octubre, Yo sugiero posponer la quedada hasta que Elías se recupere. A la seman siguiente, Juan Agulló, sufre otro accidente muy grave. 

La quedada queda suspendida, no tiene mucho sentido celebrar un encuentro con parte de los compañeros en estado grave, aunque por suerte fuera de peligro.

Asi, pasan meses, mientras nuestros compañeros se recuperan y finalmente Carlos propone una fecha para el 9 de abril, en la que podremos estar casi todos.

Vienen muchos vetereranos, figuras relevantes de la escalada, no sólo en el levante. Me da verguenza citar a unos y a otros no por no recordar o no saber sus nombres, pero citaré por lo menos a varias personas para tener una idea del impresionante grupo y la energía que había en este potente grupo.

Las estrellas: Juan Agulló y Elias Abad, y algunos integrantes del grupo para la quedada: Carlos llorca, José Manuel Vinches (el niño), Manuel Bernabé, Niguel Cebrián, Roy de Valera, Sonia Tierraseca, José Anaya, Miguel Anta, Javier Palomares, Raúl Bañon, y otros muchos que pido mil disculpas por no recordar sus nombres y no poder incluirlos en este listado de comando de titanes.

Se organizan las cordadas y cómo yo he ido sólo Carlos me agrega a la suya junto con un compañero que no recuerdo el nombre (mil disculpas), quiere hacer la Delicatessen y hacerla él toda de primero. Yo por mi parte no objeto, llevo sin escalar muuucho tiempo y creo que voy a arrastrarme por la pared.

Así pues, subimos a la pared y un largo tras otro, Carlos le va tirando de primero y nosotros vamos detrás de segundones. Aprovechando la cuerda por arriba y la tranquilidad de no pirar, subo escalando intentando encadenar todos los largos, aunque algún 6c se me atraganta y acabo cogido a una cinta.






Después bajamos y nos reunimos en el restaurante de la carretera de la subida a la cueva de Canelobre, y allí cambiamos impresiones y compartimos unas cervezas o refrescos acompañados de un ágape diverso que acaba resultando a precio de gourmet de la guìa Michelín. Sin discutir, en general, aunque se escuchan algunos comentarios de contrariedad, cada cual abona su parte. 

Pasamos una jornada de reencuentro pos-COVID y post-accidente, donde hay una animación retroactiva que alimenta la motivación. Aunque a mi me resulta un poco  ajeno, casi cómo si fuera extraño entre un consolidado y a la vez disperso grupo. En cualquier caso, para mi, ha sido un honor y privilegio, conversar con estas personas y ser partícipe de sus avatares y experiencias. Me voy muy contento de haber estado presente.

¡¡ Grandes, por los que están y por los que nos dejaron, SALUD TITANES!!