17 de marzo de 2024
Vía: Ricardo corazón de león + directa a la arista
Hoy vamos a hacer la vía
“Ricardo corazón de león” y subir hasta la cresta por la vía “Directa a la
arista NW”. Cosme, me comenta el día anterior, que ya las ha hecho y están muy
bien, yo las tenía pendientes y ya les tenía ganas.
A las 9:15, nos vemos en su
caravana, junto al aparcamiento del Cabeçò. Preparamos material, yo apenas
traigo nada, Cosme me dijo que íbamos con el suyo. Mientras estamos ahí,
aparecen María y su compañero, y se van para la vía “Cipol el bárbaro”, otra
vía del Cosme y el ya ausente Cipol.
Por el largo camino de
aproximación, vamos hablando de vías en la zona, proyectos para futuras
aperturas, y sobre todo, del inminente viaje programado para ir al Todra en
Marruecos, con José Manuel y María.
Hacemos reparto de largos, sin
echarlo a suerte, directamente Cosme me dice que como es el “Mestre” (no tiene
abuela, creo), le tira al primero, yo aprovecho para fumar, y voy preparando
cuerdas mientras él se prepara el material.
1er largo: (de la vía Gene),
4+, 30m.
Sube el Mestre Cosme, por la
evidente vira / diedro, herbosa y muy pulida, pasando entre algún arbusto
cariñoso con todo lo que se puede enganchar de lo que llevamos en el arnés, tras
unos pasos jabonosos en el diedro final que además se planta para acceder a la
gran vira / repisa de esta clásica y concurrida vía, llega al estoico pino
resignado a ser reunión.
2º largo, 5+, 30m.
Sigo yo, saliendo en diagonal
a la izquierda, buscando en la primera placa lo más evidente y compacto, algún
clavo nos indica la dirección correcta, aunque la continuidad es por una vira
diagonal muy evidente en donde lo principal es subir o bajar lo justo para no
enmarronarse en roca mala. Voy viendo algunos seguros de las vías que cruzo en
la diagonal, Zarrabandarra (el primer clavo que uso como seguro) y Lupercalia.
Coloco mis seguros flotantes, evitando lo más herboso y la roca peor, hasta
llegar a una característica cueva en medio de la pared, montando reunión a la
izquierda de la oquedad, en los espits de la vía “Horrible superior”, observando
a nuestra izquierda, vemos seguros de la vía “Fisura Murciana”, que pasan por
el lado izquierdo de la cueva a buscar la tétrica fisura chimenea rojiza de la
parte superior.
3er largo, 6a, 50m.
Sigue Cosme, saliendo a la izquierda de la oquedad y usando los primeros seguros (viejos clavos y cordinos de puentes de roca) de la Fisura Murciana, sigue en diagonal, con algún paso en travesía fina, evitando la roca más rota, cruza la Fritz Ulrich, usando alguno de sus clavos como seguro. Este largo está especialmente descompuesto y hay que extremar la atención para no tocar ni tirar ninguna piedra o bloque. Cosme lo resuelve bien, sin prisa y sin pausa, con delicada levi-tracción va pasando entre los sostres, hasta una última travesía fina a una pequeña repisa, donde está la reunión de bolts, del último largo del primer tramo de la vía “Directa a la arista”, 30 metros bajo el destacado hombro de la arista.
4º largo, 6a, 50m.
Sigo yo, saliendo hacia la
izquierda, por buena roca, por una placa compacta con escasos puntos factibles de
protección, en la que apenas meto 2 seguros, terminando este muro justo antes
de la arista, en un adosado de temblorosos y volanderos bloques que procuro
evitar por la izquierda, dando lugar a mucha cuerda volandera por debajo.
Después continúo por placa tumbada y fácil, ya por el lomo de la arista, y
después por una plataforma inclinada, de la cual, por izquierda, se puede bajar
andando a la pedrera, sigo hasta llegar al siguiente muro, y subo un poco hasta
donde está la reunión de bolts, del inicio del 2º tramo de la vía “Directa a la
arista”.
Directa a la Arista (tramo
superior), 6a+, A1+
5º largo, 6a, 55m.
Cosme me dice que le tire a
este largo por que quiere hacer de primero el artificial del siguiente.
Sigo yo, saliendo por la
derecha, sobre placa compacta hacia una oquedad que tenemos por encima formando
una ceja. Después, salir de esta, por la zona menos desplomada de la derecha,
sobre cantos planos y algún agujerito de cerrojo, con varios y exigentes pasos
en el desplome, hasta alcanzar un fracturado diedro de salientes de volúmenes y
cantos planos, con escasos tramos de fisura y bastante vertical, que acaba en
una seudo canal donde al final hay una volandera reunión, que me salto, para
seguir por arista fácil que forma una gran repisa antes del siguiente muro. A
la izquierda veo una reunión de clavos lazados con cordino para rápel, y a algo
más arriba, a la derecha, bajo una oquedad veo la siguiente reunión de la vía
de la Directa a la arista.
6º largo, 6a/A1, 50m.
Sigue Cosme. El Mestre se prepara los artilugios de artifo y chapa el primer bolt, de donde cuelga el estribo y sobre el mismo se encarama en el muro, colgándose con su fifi a la vieja usanza. Apurando estribo alcanza el siguiente seguro y cambia estribo, sobre este, sale del siguiente seguro en libre y continua por placa fisurada y bloques en la parte final del muro, hasta llegar sobre el filo de la arista que aquí aun es amplia y forma una repisa. La reunión esta lazada con cordino y maillón, parece que han rapelado de aquí por la misma vía.
Hacia arriba, la arista forma
un filo nada apetecible, de apilados y volanderos bloques encajados. A nuestra
izquierda, un canal diedro cae vertical y desplomado a la pedrera. Evaluamos
situación y decidimos rapelar directamente desde aquí a la pedrera. Montamos
cuerdas y baja Cosme primero, controlando si las cuerdas llegan bien al suelo,
a primera vista yo le digo que si, y que sobraría algo, pero tras
desengancharlas de los arbustos finales, las cuerdas caen sobre zona desplomada
y en la vertical apenas llegan al suelo, por lo que hay que ir bajando con
tendencia a llegar más arriba en la pendiente de la canal y con mucho cuidado
de no arrastrar ningún bloque de los abundantes que quedan suspendidos en la
vertical.
Tras rapelar, recogemos
cuerdas y descendemos por la ruinosa pedrera, y por el tedioso camino hasta el aparcamiento,
celebrando esta buena escalada con una cerveza sin alcohol en la caravana de
Cosme.
Muy buena escalada Mestre, un
placer compartir cuerda aun, tras más de media vida y mucha historia.
La vía, también es muy buena, muy recomendable.
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