25 agosto, 2024

Cabeçó d'Or. Vías Navarro -Giner y Escalera de Jonás

 25 agosto de 2024

Cabeçó d'Or. 
Vías Navarro -Giner y Escalera de Jonás



Han pasado varias semanas desde la última escalada, con José Manuel, aquí mismo en la vía Espolón Cipol.  Sin mucha motivación por mi parte, más por la necesidad de mantenimiento, trasrecibir su llamada el jueves antes, quedamos Joaquín y yo en el aparcamiento del Cabeçó, sin tener claro que vía hacer, allí mismo, decidimos hacer la Navarro-Giner.

Esta vía, ya la he realizado varias veces, antes y después de su re-equipamiento. Es muy asequible y buena para rodar sin apretar mucho.

Sorteamos largos y empieza Joaquín.

Omito la descripción en detalle de esta escalada, por que no hicimos ninguna foto y sus largos ya se describen en anterior entrada: Navarro-Giner 2023-05-23

Realizamos los largosen secuencia, primero Joaquín y segundo yo, y así, hasta los 2 últimos largos, que empalmo para salir de la pared.

Sin pensarlo, hemos dejado las mochilas a pie de vía, no se nos ha ocurrido, que para bajar había que destrepar un tramo fácil de cresta hacia el forat de la salida de la Patricia rítmica / Delicatessen / Espolón Cipol, desde donde se baja en 2 rápeles hacia la base de la pared por el lado oeste. 

Por no destrepar este tramo, decidimos bajar caminando por la pedrera del lado contrario y rodear la pared hasta la base de la vía que acabamos de hacer.

Mientras descendemos, vamos cambiando impresiones del reciente viaje a Dolomitas y hablando de escalada. Llegamos a la altura del rápel del collado de la pared de los Alcoyanos, vemos los seguros de la vía Escalera de Jonás, y joaquín propone, subir esta vía y rapelar hacia el otro lado para ir por las mochilas, evitando así el descenso de la incómoda pedrera y rodear toda la pared.

Vamos bien de tiempo, aunque ya ibamos en modo bar, además hace un calor sofocante por la alta humedad y no apetece mucho volver a ponerse los pies de gato, los que llevo hoy, me hacen mucho daño en los dedos. Pero, Joaquín está animado, y tras cambiar impresiones, decidimos que casi vamos a tardar lo mismo que bajar caminando.

La escalera de Jonás, 6b, 60m.

1er largo, 6a+, 30m. 
Como ha insistido tanto, Joaquín empieza el primer largo. Tras observar y calcular los movimientos de la primera sección de placa ligeramente desplomada, comienza con unos atleticos pasos hasta que llega al primer bolt. Aquí, se queda bloqueado, no ve claro el siguiente paso y tras un algún conato de intento para alcanzar el 2º bolt, acaba colgándose y reconoce que no se ve para tirar de primero. La verdad, es que el 2º bolt está un poco alto y no se ve claro si habrá buen canto para chapar la cuerda.
Al final, acabado el cigarro que me había liado mientras el se preparaba para empezar, le digo que si no lo ve, que se baje y pruebo yo.
Subo estos primeros pasos, bastante físicos pero con buen canto, que aunque no se ven evidentes (por aquí, no sube muha gente), están ahí y los voy cogiendo sobre la marcha.
Paso el primer trama desplomado y salgo a una placa con una fisura. continúo por esta hasta llegar a la derecha de un descompuesto espoloncillo que dejo a mi izquierda, para seguir por una fina placa muy compacta y disfrutona hasta que llego a un gran pino, donde está la 1ª reunión lazada con un cable para rapelar.
2º largo, 6b, 30m.
Decido continuar, y empalmo largos. Salgo ligeramente a la izquierda, con varios pasos bastante atleticos y técnicos, para encaramarme a un desplome que continúa en una aérea y compacta placa, pero más facil.
Llego a una gran repisa, unos 10 metros por debajo del collado. Aquí la vía continúa por una roma y desplomada fisura.
El roce de la cuerda es brutal, con tanta panza y las peqñas diagonales del trazado que llevo recorrido, hay mucha fricción y me cuesta mucho arrastrar la cuerda, tengo que cogerla con la mano para que no me descuelgue el arnés, y tomar cuerda para el siguiente paso, que sorprendemente, al soltarla no tira de mí.
Así, empiezo la fisura, con unos pasos ténicos de planos y adherencia, con algún cerrojo en la fisura, hasta coger un buen canto a la izquierda a mitad de este tramo. Aquí desploma más, y tengo que hacer varios cerrojos en la fisura roma, con mucho dolor y tirando como un buey de la cuerda, hasta que llego al último seguro. El último paso de salida sobre planos y la fisura que se estrecha y ya no permite casi cogerla, salgo muy precariamente, dándolo todo para poder alcanzar los planos malos de la repisa de salida bajo el corto y último resalte hasta el collado, este último, ya más facil, lo subo hiperventilando tras haber subido el anterior tramo en apnea al borde de la taquicardia.

Cuando sube Joaquín, ambos coincidimos en que en esta vía, hemos escalado mucho más que en la anterior, que casi nos parece un calentamiento.

Rapelamos desde el collado hacia la gran terraza y desde el pino hasta el pozo de la mina del Torreón.

Recogemos mochilas y bajo un sol tórrido descendemos y bajamos por el camino hasta los coches, y por fin la cerveza que llevabamos ansiando desde que iniciamos el descenso de la Navarro- Giner.